Fallece Jordi Bonell, pionero del jazz y el rock progresivo barcelonés

El destacado representante del movimiento de «música laietana», Jordi Bonell, ha fallecido a la edad de 66 años.

Poseedor de un currículum casi inabarcable, destacó por grabar algunos de los discos nacionales de rock progresivo y jazz fusión más representativos del género junto a bandas como Secta Sònica, Música Urbana y Azúcar Imaginario.

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    Y una vez más tenemos que traeros una mala noticia. En esta ocasión debemos hacernos eco del fallecimiento de Jordi Bonell, quien falleció este pasado lunes a la edad de 66 años, tal y como ha confirmado Lluís Cabrera, director de la célebre escuela barcelonesa Taller de Músics.

    Nacido en Barcelona, tuvo una formación clásica en el Conservatorio del Liceu, alcanzando un nivel tan bueno, que años después terminaría siendo docente en el mismo.
Tras estos estudios y mediante una beca, pudo seguir formándose en New York, estudiando con profesores de la talla de Jim Hall y John Abercrombie, así como participando en jams sessiones con leyendas del calibre de Frank Gambale y John Scofield.

    En la década de los setenta se unió a Xavier Pérez, Víctor Cortina y Rafael Zaragoza para fundar el grupo Secta Sònica, representante de la música laietana, y que era un movimiento musical que tenía su epicentro en la mítica sala Zeleste —posteriormente conocida como Razzmatazz—, la cual estaba situada en su origen en la calle Platería, muy cerca de la Via Laietana. Con Secta Sónica, Bonell grabaría dos discos capitales en el rock progresivo y jazz rock español, como fueron «Fred Pedralbes» y «Astroferia». Tras éstos, sus inquietudes le llevarían a tocar diversos palos, desde el jazz rock de Música Urbana, la canción de autor de Ovidi Montllor, el country con Quico Pi de la Serra, el pop rock con Bocanegra o el jazz más ortodoxo con Azúcar Imaginario.

    En el 93 y 94 fue reconocido como mejor guitarrista en dos ocasiones por la Asociación de Músicos de Jazz de Catalunya y desde esa década hasta ahora compaginó proyectos propios con grabaciones como sesionero y/o músico en directo para figuras tan importantes como Lola Flores, Joan Manuel Serrat, Gato Pérez, Dyango, Moncho  y Miguel Bosé, entre otros.
No obstante, se las ingenió para no apartarse nunca de su pasión por el jazz, compartiendo escenario con Chet Baker, Jim Hall, Gary Willis, Jorge Pardo, Carles Benavent o Chano Domínguez y siendo profesor en el Taller de Músics de Barcelona.

    Con un currículum envidiable y una vida que supo disfrutar al máximo, Bonell nos ha dejado a los sesenta y seis años debido a un enfisema pulmonar en la localidad de Caldas de Estrach.

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  Y no hay mucho más que decir. Desde esta casa te damos las gracias por tantos años de buena música y por el legado que has dejado en los corazones de tus fans.

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TEXTO: Equipo de redacción

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