Jim Rodford, bajista de los míticos The Kinks y Dave Holland, ex baterista de Judas Priest, han fallecido con apenas cinco días de diferencia.
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La semana pasada publicamos una noticia en la que mencionábamos lo negro que estaba siendo este comienzo de año, con las muertes de músicos tan talentosos como Dolores O’Riordan, “Fast” Eddie Clarke, Mikio Fujioka y Chris Tsangarides —enlace a la noticia aquí—. Y tratándose de una noticia tan impactante, pensábamos que al menos tendríamos algo de tregua, pero no ha sido así, puesto que en otra semana especialmente negra, se nos han ido Jim Rodford y Dave Holland.
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Rodford ha fallecido el pasado sábado 20 a la edad de 76 años y se ha conocido la noticia por el también músico y primo de éste, Rod Argent, quien informó en el Twitter de The Zombies que la causa del fallecimiento ha sido la caída accidental por unas escaleras.
El bajista formó parte de los míticos rockeros The Kinks durante 19 años, desde 1.978 hasta la separación del grupo en el 96, dejando un legado de magníficos álbumes com «Low Budget«, «State of confusion» o «Phobia», y sobretodo, esa inmortal «You really got me», magníficamente versionada años después por Van Halen y considerada por una buena parte de la crítica como la primera canción heavy metal de la historia.
Aún habiéndose separado, The Kinks han estado volviendo al ruedo en numerosas ocasiones a lo largo de los años, ya sea para homenajes o festivales, estando Rodford siempre involucrado en estos retornos.
Otro proyecto al cual estaba atado fuertemente era The Zombies, combo al que le unía amistad y colaboraciones desde los 60, pero que se convirtió en su grupo fijo desde 2.004 hasta ahora su muerte.
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Por su parte, Dave Holland (no confundir con el prestigioso contrabajista de jazz británico con el mismo nombre artístico), nos dejó el pasado martes 16 a la edad de 69 años, aunque no ha sido hasta este lunes cuando la noticia se ha dado a conocer.
Su muerte tuvo lugar en el Hospital Universitario Lucus Augusti de Lugo a los 69 años. El baterista residía en Lamas de Campos —Lugo— desde hacía varios años, dónde mantenía una vida tranquila, discreta y solitaria y según algunos vecinos, se trataba de una persona educada y amable.
Ni por parte de su familia y su management se conocen las causas de la muerte, habiéndose incinerado sus restos ya.
La vida tranquila mencionada contrasta con el elevado nivel técnico y agresividad a la hora de tocar la batería durante su estancia en Judas Priest. Suyas son las apocalípticas y creativas bases rítmicas que pueden escucharse en álbumes como «British Steel», «Screaming for Vengeance» o «Defenders of the faith».
La última colaboración con la icónica banda metalera data del 88, cuando salió a la luz «Ram it down». Pese a que, en un intento de modernizar el sonido de la banda y experimentar, las baterías de ese disco fueron programadas, Holland compuso y programó esas líneas como si las tocara él mismo.
Al margen de tan gloriosa etapa en Judas Priest, Holland también fue conocido por la fundación junto a de Glenn Hughes de la genial banda de hard rock, Trapeze.
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TEXTO: Equipo de redacción
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