Desde 1.997, el programa de radio más veterano dedicado a la música de guitarristas y bajistas.

Crítica: Andy James «C​·​S·​I·​L»

andy james C​.​S​.​I​.​L cd cover

.


FICHA

  • Artista: Andy James
  • Sello:   Autoproducción
  • Año:    2.020
  • Estilo: Heavy metal, heavy metal neoclásico, metalcore, shred

CALIFICACIÓN

CALIFICACIÓN TÉCNICA

  • Nivel de técnica: 10/10
  • Variedad de fraseo, recursos y técnicas: 8/10
  • Velocidad: 10/10
  • Nivel de coñazo virtuosístico: 4/-10
  • Calidad producción (equilibrio en la mezcla, masterización, etc.): 8/10
  • Calidad presentación (carátula, libreto, etc…): 7/10

PUNTUACIÓN: 8,2/10

CALIFICACIÓN MUSICAL

  • Calidad musical: 7/10
  • Nivel de feeling: 7/10
  • Posibilidad de escucharlo de un tirón: 7/10
  • Ganas de hacer “headbanging”: 10/10

PUNTUACIÓN: 7,75/10

.
PUNTUACIÓN TOTAL: 8/10

.


INTRODUCCIÓN

.

andy james 01   Comenzamos la semana compartiendo la crítica del último trabajo realizado hasta la fecha por el británico Andy James. Conocido en el mundo de la guitarra eléctrica por ser instructor desde hace muchos años para empresas como JamTrack Central y también por sus libros y métodos didácticos sobre técnica, transcripciones de canciones y vídeos «al estilo de» (clonando la ejecución y sonido de guitarristas famosos, y en ocasiones, creando piezas de tal dificultad que incluso esos guitarristas imitados tendrían problemas en tocar), se ha creado la fama de ser un «tocalotodo» al más alto nivel. A esto también han contribuido sus numerosas composiciones —siempre en una onda de shred instrumental— y las jams colaborativas con otros youtubers guitarreros famosos, en las que siempre demuestra una técnica apabullante, velocidad de otro mundo y un punto de contundencia y agresividad que no suele verse en este estilo.
Y en mi opinión esto último es su rasgo más diferenciable, ya que en su manera de tocar escucho más a Zakk Wylde y Jeff Loomis que no a John Petrucci, que es con quien se le suele comparar.

   El Andy James compositor nos ha entregado hasta el momento cuatro álbumes con su banda Sacred Mother Tongue y siete en solitario (siendo su «Exodus» de 2.017, finalista en la categoría a «Mejor Álbum de guitarra eléctrica instrumental clásica» dentro de nuestro ciclo de programas en los que analizamos lo mejor de la década en cuanto a guitarra y bajo, y que puedes escuchar en este enlace), habiendo comenzado su carrera en 1.999, lo que demuestra que, a diferencia de otros músicos virtuosos que se han hecho famosos en el mundo de la enseñanza, él nunca ha dejado de lado su propia carrera musical, pese a que con lo que se gana la vida es con sus clínics, masterclasses y análisis técnicos. 
Y es que no olvidemos que el shred metalero instrumental no es el género más propicio a vender millones de CD’s, y menos en estos tiempos del Dios Streaming.
De todas formas, el pasado octubre fue anunciado a bombo y platillo que la conocida banda de groove metal y metalcore norteamericana Five Finger Death Punch retomaban su actividad tras la cuarentena y lo hacían con cambio de guitarrista: Andy James por Jason Hook. De este modo, el que James se haya integrado en una banda de primera división sin duda lo pondrá en el punto de mira de muchos aficionados al metal que buscan guitarras potentes pero no necesariamente son amantes de los proyectos instrumentales virtuosos. 

    Es obvio que lo que vamos a escuchar en este «C·S·I·L» va a ser toda una oda al exceso, llena de veloces piruetas sobre el mástil y una ejecución diseñada para prender fuego al mástil, todo ello sobre una base de contundente heavy metal con ocasionales incursiones en el neoclásico y el progresivo, pero también melodías sencillas aunque efectivas, un trabajo rítmico notable y una producción excelente.

    Diez son las canciones que forman el álbum, el cual ha sido enteramente realizado por él mismo: composición, ejecución de todos los instrumentos —a excepción de las baterías que han sido programadas también por él—, grabación, mezcla, mastering y producción. 
Una multitarea arriesgada aunque si el disco al final gusta o no, solamente habrá una persona a la que agradecer o culpabilizar.

,

andy james 04

.


ANÁLISIS DE LAS CANCIONES

.

    Los que seáis lectores habituales de la página, ya os habréis dado cuenta que acostumbramos a analizar los discos canción a canción, salvo cuando nos encontramos con un álbum que posee una coherencia y cohesión estilística total y en el cual hay diferencias mínimas entre las canciones (es curioso que esto que no es habitual, también nos ha pasado hace muy poco con la crítica del «PWR/UP» de AC/DC —enlace al artículo aquí—), por lo que ahora podréis leer mis impresiones de los mejores momentos del álbum en vez de un análisis pormenorizado de todo lo que contiene

    De todas formas, esta sección del artículo finalizará con la lista oficial de Spotify para que podáis oírlo al completo.

.

Boots on the ground. Sonidazo el que James saca a esa Kiesel de siete cuerdas, para una base rítmica que une a la perfección las tendencias clásicas y actuales del metal. A mitad de canción se transforma en un medio tempo con una melodía bastante interesante. A destacar también la intro del solo, con unas dobles notas bastante originales y el solo mismo, bastante más corto de lo que podría esperarse.

Satellites. Podría parecer que en un álbum así no tiene cabida una balada y, sin embargo, el británico se las arregla para colarnos una… ¡y que además sea muy buena! Y no sólo eso, sino que aunque contenga una melodía bonita y sentida, no renuncia a una sección rítmica bien contundente.

Burning blade. Sin concesiones. Así es como empieza esta canción, con una poderosa rítmica y una compleja línea solista con saltos de cuerda muy a lo Paul Gilbert, sin introducción ni nada. Sin embargo y aunque sea algo secundario, también tenemos un interesante motivo melódico o estribillo. 
De todas formas, el que quiera un festival de shred, aquí lo va a encontrar con la extrema destreza y limpieza que caracteriza a Andy James.
Y si buscáis referencias, seguro que os gusta la sección central con cuerdas al aire muy típica de Joe Satriani

The long road. Segunda balada del disco y en este caso, más oscura, dramática e incluso cinematográfica que «Satellites». Pese a que tampoco renuncia a crear un acompañamiento contundente como en aquella, el contenido melódico y emocional está muy presente durante toda la composición.

Cut me open. Como es obvio, el tema que da cierre al álbum tiene que ser todo un festival shred, pero también es una pieza oscura con un trabajo rítmico muy interesante, como si Black Sabbath y Meshuggah se hubieran fusionado.

.

andy james 04

.


CONCLUSIÓN

.

    Como era previsible, todo el álbum es una fiesta de shred hipertécnico y desmelado, aunque también de guitarras rítmicas, bajos y baterías bien contundentes y poderosos. En este sentido, es un álbum que me recuerda mucho a otro ya analizado por aquí: el «Plain of oblivion» de Jeff Loomis —enlace a la crítica en este enlace—, un trabajo muy agresivo con constantes escapadas al thrash y al death metal y mayoría de temas instrumentales. La diferencia principal, sin embargo, es que en aquel, Loomis optó por restarle protagonismo a la guitarra solista en pro de crear un determinado ambiente estético, y James, por su parte, tiene bien claro que la guitarra solista es la que manda, y todo el resto gira a su alrededor.
No obstante, esto no es óbice para que se olvide de crear estribillos y melodías reconocibles, aunque es cierto que estos se caracterizan por su sencillez, por lo que no creo que vayáis a recordarlos y tararearlos tras finalizar la escucha del álbum.

    En cualquier caso, pese a que conceptos como shred, virtuosismo o heavy instrumental puedan echar hacia atrás a los fans metaleros que tampoco gustan de estas propuestas, es necesario destacar que «C·S·I·L» es ante todo un disco muy entretenido, con canciones que no superan los cuatro minutos de duración —o ni llegan— y contienen solos de guitarra tocados al 200% pero breves pese a lo que dictan los cánones del género, y que posee unas bases ideales para hacer headbanging hasta quedarte sin cuello.

    En definitiva, estamos ante un trabajo que no innova ni pretende hacerlo y no resulta demasiado variado en sus composiciones, pero que está dirigido a un micronicho muy concreto de aficionados al metal, que demuestra hasta dónde pueden llegar las manos y la técnica de guitarra eléctrica, que te pondrá las pilas en un día de bajón y lo más importante, que a diferencia de otros álbumes similares, no aburre en ningún momento como los de cierto guitarrista sueco.

    ¡Ah! Y encima, la mezcla es perfecta,  con una compresión y pegada brutales que bordean peligrosamente la loudness war, aunque sin llegar a provocarnos cansancio auditivo, así que Andy James no sólo es un gran músico y un virtuoso de las seis cuerdas, sino un destacado mezclador y productor. Vamos, que lo tiene todo. Ahora sólo le falta sonreír en las fotos promocionales y ya tendremos el combo completo.

.

andy james 03

.

TEXTO: Albert Sanz

Etiquetado como: , , , , , , , , , , , , , , ,

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Web de la Ona de Sants-Montjüic

¡Escucha la Ona de Sants-Montüic en directo!

FaceBook Oficial de la Ona de Sants-Montjüic

A %d blogueros les gusta esto: